ESPECTADORES DE PRIMERA

 


Fondo Monetario Internacional
No hay para qué sentarse a esperar
los sepultureros han llegado
son doctores respetables
cuyo único defecto consiste
en querernos matar.

El elegido
Aunque no había sido electo,
lo nombraron presidente
y aunque no sabía hablar,
leía muy buenos discursos.
Afirmaba que su llegada al poder
confirmaba que cualquier mediocre
podía ser presidente.
Ante el Congreso repitió con cara seria
una más de sus homicidas payasadas:
“La única manera de preservar la paz actual
es autorizando la guerra”.
Los miles de muertos que le siguieron
no se rieron con el chiste.

Imágenes y semejanzas
Si Dios creó al hombre
a su imagen y semejanza,
¿lo creó infinitamente estúpido,
eternamente avaro,
inmensamente agresivo
y perpetuamente derechista?


Hora de despertar
Mientras el pueblo dormía,
sus gobernantes complotaban:
le quitaron el derecho a la protesta,
el derecho al voto,
el derecho a cuestionarse las cosas,
el derecho a trabajar,
el derecho a liberarse
y finalmente,
el derecho a la vida.
Aquellos que siguieron durmiendo
ya no se pudieron despertar.

Milagro en Roma
Acto seguido, el Papa salió al balcón
y condenó al imperialismo
y como por milagro
los misiles se convirtieron en azadones
y los bancos internacionales
en instituciones de caridad.
En ese momento se terminó la película
y todo volvió a la normalidad.

Cuestión de nombres
Lo ilegal continúa siendo legal
sólo que se le cambia de nombre.
No hace mucho
la esclavitud era una práctica honrada
los linchamientos una forma de justicia
y el genocidio el derecho natural de los vencedores.
Hoy en día
la esclavitud asalariada es la norma aceptada
la pena de muerte una venganza justificada
y el genocidio un subproducto de la guerra.
Y claro está, dentro de un par de siglos
no habrá tampoco manera de juzgar
a los genocidas ya muertos
(príncipes, presidentes, generales o dictadores)
por todos los crímenes cometidos.

Castillo de palabras
Finalmente he entrado a habitar
un castillo de palabras,
es un mundo mágico
donde las palabras
me persiguen sin parar;
palabras escritas y habladas
esterilizadas y enlatadas
palabras azucaradas
con sabor a vainilla
palabras que me dicen a quién odiar
y en qué creer
a qué dioses adorar;
palabras que me quitan de encima
la tremenda carga de pensar.

Todo es un poema
Ya que uno que otro lector
puede pensar
que por esto o aquello
o por lo de más allá,
esto no sea
un libro de poemas
para curarme en salud,
declaro que de hoy en adelante
todo es un poema:
el gato que se rasca la barriga
en medio de la sala es un poema,
la peluca de mi tía Mariana
es un poema,
la basura regada por la calle
es un poema,
“agítese bien antes de usarse”
es un poema,
todo lo que aquí se diga
de ahora en adelante es un poema.

Hoy aprendí a leer
Hoy aprendí a leer
y leí los letreros
que veía por las calles:
“prohibida la entrada”
“propiedad privada”
“una sola vía”
“curvas peligrosas”
“cuidado con el perro”
“no doblar a la izquierda”
“entre bajo su propio riesgo”
“callejón sin salida”

Y finalmente comprendí
por qué el resto de la humanidad
me parecía tan domesticada.

Noticiero 7:30
Nunca he entendido
por qué se necesitan
mujeres tan bonitas
para leer noticias tan feas;
si es para que les miren la cara
que simplemente lean cada noche
las páginas amarillas
y que se ahorren las noticias.

También nacen poetas
Los niños nacen sabios
pero el mundo
trata por todos los medios posibles
de embrutecerlos;
nacen llenos de verdad
pero el mundo
los educa con mentiras;
también nacen poetas
y el mundo los transforma
en políticos, clérigos o generales;
sin embargo, unos cuantos
llegan a ser grandes sabios
que dicen sus verdades en verso
y nos devuelven el niño perdido
a aquellos que todavía
lo llevamos dentro.

Aviso presidencial
Motivo viaje
vendo país
hermosa república tropical
habitantes incluidos
buenos, trabajadores
sumisos y obedientes;
ideal para compañía multinacional
interesada en explotar
petróleo, café y bananos.
Encimo selva tropical.
Imperios interesados
favor depositar sobornos
en mi cuenta personal.

Parar oído
Dicen que las paredes
tienen oídos
pero lo que yo he visto
es que algunas personas
tienen paredes en los oídos.

Cristóbal Cartón y sus 40 piratas
Cristóbal Cartón
y sus 40 piratas
navegaron
por un mar de natas,

entre más navegaba
y navegaba
menos sabía don Cartón
por dónde andaba.

Un día, una isla rara
golpeó a don Cartón y
a sus piratas en la cara.

"Tierra en la vista",
gritó Cartón,
sacándose de un ojo
un terrón.

Cuando andaba perdido,
Cartón fue descubierto
por un grupo de nativos
que en su idioma dijeron:
"Bienvenido".

Cartón que no sabía
nada de modales
ni de geografía,
no contestó el saludo.

Tan sólo escribió en su diario:
"Llegué a la China,
estoy seguro,
la isla donde saltan los canguros".

Y en una isla de chocolate,
plantó Cartón su bandera pirata
y se robó así,
de la forma más sencilla,
todo un continente,
una luna de cacahuate
y dos mares de mantequilla.

"Agarren a Cartón
y a sus 40 ladrones",
gritó un loro,
"me ha robado las plumas
y a los nativos el oro".

Don Cartón, el pirata
no tuvo decoro,
exterminó a los nativos
y hasta mató al loro.

Devuelto a España encadenado
Cartón, el pirata deliraba,
"Soy dueño del tesoro,
de mares de esmeralda
y de montañas de oro".

Cristóbal el pirata,
cabeza hueca
y corazón de lata
murió sentado en una silla.

Una pierna la enterraron
en una isla americana
y la otra
la enterraron en Sevilla.

Dónde están hoy todos sus restos,
a ciencia cierta no es sabido,
Don Cristóbal, el pirata
aun después de muerto
anda perdido.

Poema nocturno para seres diurnos
Por la noche las sombras
se escapan de sus dueños
crean el caos en bares y cementerios,
escuelas y jardines
burdeles y monasterios
algunas se emborrachan
con el perfume de las flores
y se quedan dormidas
en los atrios de las iglesias
otras aprovechan
para vengarse de sus benefactores;
al otro día
sus dueños amanecen asombrados
y ensombrecidos
se ponen sus sombreros
abren sus sombrillas
y salen a las calles sombrías
sin siquiera sospechar
por qué sienten desconfianza
hasta de su propia sombra.

Mi patria

Mi patria tiene ríos y montañas,
lagos, llanuras,
selvas y playas.

Por mi patria vuelan aves
que decoran el cielo con sus alas,
guacamayas de azules plumas
y quetzales de colas largas.

En mi patria se hablan muchas lenguas
y se ven muchas caras.
Hablamos español, inglés, francés,
chino, quichua, árabe y japonés.

Mis compatriotas son blancos
negros y cobrizos,
de cabellos oscuros o rubios,
de pelo lacio y con rizos.

En mi patria crecen muchas frutas:
manzanas rojas como corazones,
piñas jugosas, naranjas, limones,
bananas doradas y sabrosos melones.

Por su geografía de desierto y piedra
se esconden culebras y salamandras
y por sus bosques con olor a selva
aúllan los monos y vuelan las garzas.

Mi patria tiene una gran bandera
donde se ven rayas y estrellas
soles y lunas,
triángulos y esferas;
mi bandera está vestida de colores
que representan el cielo, el mar,
los bosques y las flores.

Yo quiero a mi patria;
no arrojo basuras a las calles
pues la quiero ver bella;
no contamino ni su aire ni su agua,
y cada primavera
siembro un árbol en honor a ella.

Mi patria no tiene
ni cercas ni fronteras
las nubes la cruzan
las aves la vuelan
los ríos la bañan
y los mares la besan.

Mi patria tiene un sol
que siempre nos alumbra y nos calienta
y una luna que por la noche nos mira.
Mi patria es mía y es de todos;
mi patria respira,
da giros y vueltas.

Mi patria es una burbuja de vida
que flota en un universo
rodeado de estrellas;
mi patria es redonda
luminosa y bella.
Mi patria es el planeta Tierra.

Subasta pública
Cómprelos, llévelos, alquílelos,
los hay de todos los tamaños
y persuasiones
¿quién da más?
Pague dos y lleve tres,
políticos en promoción
calvos, barrigones, maquillados
usen pantalones o faldas
no importan las apariencias
porque por dentro todos son iguales
seres generosos
consigo mismos
de insaciables billeteras
y bolsillos sin fondo,
por su compra
le encimamos 2 generales
bien entrenados
en el arte de disparar
por la espalda;
pero en una subasta como ésta
no podría faltar
un ejemplar de presidente
el aquí presente
es flaco y de gafas
se come las palabras
y se chupa los dientes
especialista en subir los impuestos
y en bajar los sueldos
es obediente con el amo
y carnívoro con su pueblo
mastica el inglés
y sancocha el español
lo ofrecemos en alquiler
por horas, minutos o segundos
viene con bozal incluido
porque en un descuido
también puede morder.
¡A la una, a las dos, y las tres!
¡Esta tanda queda vendida
al amo del Norte!
Y no se les olvide
que tenemos más ejemplares
a la espera
¡Entren y escojan!
Por favor, no se queden en la puerta
¡Sigan y hagan sus ofertas!

Mano firme, corazón grande
El policía
de mano firme y corazón grande
golpeó al preso con violencia
y después sintió lástima
de su heridas
El funcionario
de mano firme y corazón grande
cometió un gran desfalco
y después lloró por todos los niños
que se quedarían sin escuela
El general
de mano firme y corazón grande
dio la orden de disparar a mansalva
y después les dijo a las viudas
que lo sentía en el alma
El político
de mano firme y corazón grande
fue elegido presidente
pero al poco tiempo
ya no engañaba a nadie
ni con sus acciones ni palabras.

Diálogo...
—Madre, ayúdame a ser nube
y a dibujar montañas en el cielo.
—Eso no puedo, hija,
las nubes no tienen
alma ni cuerpo.

—Madre, ayúdame a ser viento
y a silbar con voz dulce por el firmamento.
—Eso tampoco puedo, hija,
el viento es escurridizo
y no hay lazos con qué cogerlo.

—Madre, ayúdame a ser el río
que le hace cosquillas a los cerros.
—Eso es imposible, hija,
el agua está hecha de humo
y se me escapa entre los dedos.

—Madre, ayúdame a ser árbol
y a echar raíces en el suelo.
—Eso sí puedo, hija.
Y la fruta cayó al suelo
y una semilla de amor
vio germinados sus deseos.


A ella, que ilumina mis sentidos

Todavía siento
tu mano tibia, tu mano santa
rozar mi mano
con esos dedos llenos de calma,
todavía siento tus labios dulces
tus labios sabios,
acariciarme con tus palabras,
todavía siento en mí tus ojos
que más que verme
me iluminan y me traspasan,
todavía oigo en mí tus versos
de ese poema que es tu alma...


¿Qué es la muerte?
Para el existencialista, la muerte es un estado del ser,
para el materialista, el complemento dialéctico de la vida,
para el capitalista, una pérdida de ingresos,
para el religioso, un viaje al más allá,
para el neurótico, una angustia insufrible,
y para el científico, un cambio de estado de la materia.

Para mí, la muerte es simplemente el olvido
por eso creo que si recordamos a nuestros muertos
ellos continúan vivos
por eso procuro cada noche soñarme con ellos
por ejemplo, me sueño con mi tía abuela
que murió virgen a los 82 años cuando se golpeó
en una caída la nuca contra la acera
y en mi memoria, su sonrisa sigue igual de viva.

Me sueño con mi hermano
que murió a los 21 años en un accidente
y abro su maletín de viaje, cargado de poemas,
y allí veo su crema de dientes, la foto de la novia
que nunca llegó a ser su esposa y su sonrisa perenne.

Me sueño con mi padre, asesinado por el cigarrillo
a los 61 años y en mi sueño continuamos
aquella partida de ajedrez que nunca terminamos.

Los días de sus cumpleaños mis muertos me visitan
y juntos celebramos ese día, porque después de la muerte
uno sigue cumpliendo años,
porque después de la muerte siguen los aniversarios
porque después de la muerte, seguimos vivos
si dejamos un ser, un sólo ser en el mundo
que se niegue a olvidarnos.


Poesía subversiva
La poesía es un arma
subversiva de la imaginación
por medio de la cual
encontramos
cómo se relacionan
las cosas que no tienen relación
soñamos
lo que nos prohíbe la razón
sentimos
lo que nos oculta el corazón
La poesía es un arma
con la cual el alma
declara su subversión
ante un mundo que gira
sin ton ni son...

Para luchar el olvido
¿Cuántos olvidos componen un segundo?
¿Cuántos latidos abarcan un minuto?
¿Cuántos suspiros marcan el paso de una hora?
¿Cuántas lágrimas se riegan en un día de lluvia?
¿En cuántas semanas envejecen
los rostros que no pueden ver la luna?

¿Es acaso un mes
la medida de tiempo más exacta
entre un gemido
y una casa olvidada en la distancia?
Tal vez un año de hambre no sea nada.
Pero, ¿cuántos seres caben
en un siglo de historia?
¿En dos, tres, cuatro o cinco siglos
de miseria y de sangre?

No lo sé.
Ni todos los dedos de mis manos
y mis pies,
junto con los de miles
de otros pies y otras manos
alcanzarían a contarlos.

Sólo sé
que cuando se llenan
aunque sea de gotas
los pétalos de una rosa

ésa puede ser la copa
que desborde
un río
con mil siglos acumulados de olvidos y esperanzas.


Espectadores de primera
Estuvimos en un cine de tercera
viendo una película de segunda
y fuimos espectadores de primera.
El león de la Metro
casi nos pega un mordisco
y entonces descubrimos
que tan sólo era un gato
disfrazado con una melena;
las pestañas postizas
de una actriz
cayeron en primera fila
logramos pegarlas
de nuevo a la pantalla,
pero quedaron
en el rostro que no era;
fuimos salpicados
con la sangre de los muertos
en una escena de guerra,
sabía a salsa de tomate
así que aprovechamos
para condimentar con ella
un perro caliente abandonado
en una escena callejera.
Cuando empezó la balacera,
una bala perdida
mató a un general
que se reía
en la tercera fila,
mientras nosotros quedábamos empapados
en una escena de lluvia
y nos dormíamos
en la misma pieza
con una pareja
que entraba a un hotelito
en una cita clandestina.
Cuando se acabó la película
y vino el noticiero
no creímos lo que decía.
Silbamos cuando apareció el presidente
y entonces nos echaron de la sala,
por ser espectadores de primera
asistiendo a una película de segunda
en un cine de tercera.


Quinientos años de distancia

Nos une el idioma,
pero nos separan las palabras,
nos une la raza
pero nos separa el color de la piel,
nos unen los ideales
pero nos separan las ideas,
nos une la herencia
pero nos separa lo heredado,
nos une la geografía
pero nos separan las fronteras...

Edicto
Por orden del gobierno
queda prohibida su sombra
ya sea de sol o de luna,
guárdela donde pueda,
encójala,
amenácela,
desintégrela,
pero haga que desaparezca,
es una sombra dañina,
corroe las estatuas
de los padres de la patria,
entorpece el funcionamiento
de los ángulos rectos,
tuerce a los estudiantes de derecho
y endereza a los torcidos.
Se dan dos días de plazo,
cualquier ciudadano
que sea sorprendido
arrastrando consigo una sombra
será arrestado de inmediato.
Sólo se puede transitar al mediodía.
Todas las sombras
incluyendo hasta
las de los eclipses
a partir de la fecha
son declaradas subversivas.


La mosca
Ha entrado a visitarme
una mosca
seguramente
sintió curiosidad
al verme,
se metió por la ventana
y me contempló
sentado en esta silla
con una hoja en blanco
tratando de escribirle un poema
a las cosas raras de la vida.
Le debí parecer un tipo muy aburrido,
porque de inmediato
tal como había venido
se marchó.
No me importan esos desaires,
de todos modos
a quién le interesa
trabar amistad
con una mosca cualquiera.


Los zapatos son como la vida

De esquina en esquina,
iban los zapatos viejos.
Habían sido abandonados
después de mucho caminar
por su dueño.
Trataban de volver a casa
como un perro fiel
perdido en el invierno.

Sus suelas gastadas
habían visto mejores tiempos.
Se soñaban bailando
y corriendo,
recordaban haberse visto nuevos,
con el cuero reluciente y sin agujeros.

Y claro está, no podían olvidar
la primera vez que los penetró un pie,
la extraña sensación
de ser poseídos
por una planta y cinco dedos.

Al principio,
todo era como un sueño,
la luna de miel,
el zapato casado con el pie,
el matrimonio perfecto.

Recordaban la primera lustrada
y aquel gran baile,
¡Tanto paso!
¡Tanto zapateo!

Por un tiempo,
habían sido los reyes de las alfombras
y del pavimento.

Pero después,
vinieron los celos,
aquel par de botas perversas
que ocupaban a ratos su puesto.

Luego vendría el primer dolor,
un tacón roto contra un hueco,
el hueso partido y el doctor zapatero.
¡Qué falta de cariño!
a cola y puntillazos
los compusieron.

Después sería la rutina asesina,
el mal olor, los callos,
caminar por barro y aguaceros.

El cuero se arrugó y se puso tieso,
en un partido de fútbol
les sobrevino el primer agujero.

Y un día, ¡aciago día!
después de todo lo que habían hecho por su dueño,
él los abandonó en una esquina
y se fugó con un par de zapatos nuevos.

Por primera vez sintieron frío
sin el calor de un cuerpo.
Caminaron solos, tratando de volver a casa
y llegaron a un parque y allí se detuvieron.

Cuando el hombre los encontró durmiendo,
supo que aquellos zapatos
necesitaban un dueño.
Se los puso
y los zapatos revivieron.

El anciano bailó y saltó,
él y los zapatos
se sintieron en el cielo.
Los zapatos volvieron a nacer
en otros pies
y caminaron orgullosos
una vez más.

Visitaron callejones y monumentos,
durmieron en parques y aeropuertos.

Después, llegó una vez más el invierno
y una mañana,
zapatos y dueño,
amanecieron congelados
para siempre
sobre el frío pavimento.


Poema en blanco

Al final de este libro
aparecen varias hojas en blanco
son hermosos versos
que jamás fueron escritos:
poemas de amores inconclusos
odas a la melancolía
diatribas contra la injusticia
sonetos de perfecta rima.
Pero, estimado lector,
no se asuste
si nunca antes ha leído
un poema en blanco.
Leer un poema en blanco
es como hacer malabarismo
con los malabares de la fantasía
o hacer ilusionismo
con las ilusiones de la creación.
Aunque estén en blanco,
por favor, no dejen de leer estos poemas
y en caso de emergencia
rompan el vidrio de la imaginación
para que ésta se desborde
e inunde los espacios en blanco
con sus propias palabras.




























































































































































































Fondo Monetario Internacional
No hay para qué sentarse a esperar
los sepultureros han llegado
son doctores respetables
cuyo único defecto consiste
en querernos matar.

El elegido
Aunque no había sido electo,
lo nombraron presidente
y aunque no sabía hablar,
leía muy buenos discursos.
Afirmaba que su llegada al poder
confirmaba que cualquier mediocre
podía ser presidente.
Ante el Congreso repitió con cara seria
una más de sus homicidas payasadas:
“La única manera de preservar la paz actual
es autorizando la guerra”.
Los miles de muertos que le siguieron
no se rieron con el chiste.

Imágenes y semejanzas
Si Dios creó al hombre
a su imagen y semejanza,
¿lo creó infinitamente estúpido,
eternamente avaro,
inmensamente agresivo
y perpetuamente derechista?


Hora de despertar
Mientras el pueblo dormía,
sus gobernantes complotaban:
le quitaron el derecho a la protesta,
el derecho al voto,
el derecho a cuestionarse las cosas,
el derecho a trabajar,
el derecho a liberarse
y finalmente,
el derecho a la vida.
Aquellos que siguieron durmiendo
ya no se pudieron despertar.

Milagro en Roma
Acto seguido, el Papa salió al balcón
y condenó al imperialismo
y como por milagro
los misiles se convirtieron en azadones
y los bancos internacionales
en instituciones de caridad.
En ese momento se terminó la película
y todo volvió a la normalidad.

Cuestión de nombres
Lo ilegal continúa siendo legal
sólo que se le cambia de nombre.
No hace mucho
la esclavitud era una práctica honrada
los linchamientos una forma de justicia
y el genocidio el derecho natural de los vencedores.
Hoy en día
la esclavitud asalariada es la norma aceptada
la pena de muerte una venganza justificada
y el genocidio un subproducto de la guerra.
Y claro está, dentro de un par de siglos
no habrá tampoco manera de juzgar
a los genocidas ya muertos
(príncipes, presidentes, generales o dictadores)
por todos los crímenes cometidos.

Castillo de palabras
Finalmente he entrado a habitar
un castillo de palabras,
es un mundo mágico
donde las palabras
me persiguen sin parar;
palabras escritas y habladas
esterilizadas y enlatadas
palabras azucaradas
con sabor a vainilla
palabras que me dicen a quién odiar
y en qué creer
a qué dioses adorar;
palabras que me quitan de encima
la tremenda carga de pensar.

Todo es un poema
Ya que uno que otro lector
puede pensar
que por esto o aquello
o por lo de más allá,
esto no sea
un libro de poemas
para curarme en salud,
declaro que de hoy en adelante
todo es un poema:
el gato que se rasca la barriga
en medio de la sala es un poema,
la peluca de mi tía Mariana
es un poema,
la basura regada por la calle
es un poema,
“agítese bien antes de usarse”
es un poema,
todo lo que aquí se diga
de ahora en adelante es un poema.

Hoy aprendí a leer
Hoy aprendí a leer
y leí los letreros
que veía por las calles:
“prohibida la entrada”
“propiedad privada”
“una sola vía”
“curvas peligrosas”
“cuidado con el perro”
“no doblar a la izquierda”
“entre bajo su propio riesgo”
“callejón sin salida”

Y finalmente comprendí
por qué el resto de la humanidad
me parecía tan domesticada.

Noticiero 7:30
Nunca he entendido
por qué se necesitan
mujeres tan bonitas
para leer noticias tan feas;
si es para que les miren la cara
que simplemente lean cada noche
las páginas amarillas
y que se ahorren las noticias.

También nacen poetas
Los niños nacen sabios
pero el mundo
trata por todos los medios posibles
de embrutecerlos;
nacen llenos de verdad
pero el mundo
los educa con mentiras;
también nacen poetas
y el mundo los transforma
en políticos, clérigos o generales;
sin embargo, unos cuantos
llegan a ser grandes sabios
que dicen sus verdades en verso
y nos devuelven el niño perdido
a aquellos que todavía
lo llevamos dentro.

Aviso presidencial
Motivo viaje
vendo país
hermosa república tropical
habitantes incluidos
buenos, trabajadores
sumisos y obedientes;
ideal para compañía multinacional
interesada en explotar
petróleo, café y bananos.
Encimo selva tropical.
Imperios interesados
favor depositar sobornos
en mi cuenta personal.

Parar oído
Dicen que las paredes
tienen oídos
pero lo que yo he visto
es que algunas personas
tienen paredes en los oídos.

Cristóbal Cartón y sus 40 piratas
Cristóbal Cartón
y sus 40 piratas
navegaron
por un mar de natas,

entre más navegaba
y navegaba
menos sabía don Cartón
por dónde andaba.

Un día, una isla rara
golpeó a don Cartón y
a sus piratas en la cara.

"Tierra en la vista",
gritó Cartón,
sacándose de un ojo
un terrón.

Cuando andaba perdido,
Cartón fue descubierto
por un grupo de nativos
que en su idioma dijeron:
"Bienvenido".

Cartón que no sabía
nada de modales
ni de geografía,
no contestó el saludo.

Tan sólo escribió en su diario:
"Llegué a la China,
estoy seguro,
la isla donde saltan los canguros".

Y en una isla de chocolate,
plantó Cartón su bandera pirata
y se robó así,
de la forma más sencilla,
todo un continente,
una luna de cacahuate
y dos mares de mantequilla.

"Agarren a Cartón
y a sus 40 ladrones",
gritó un loro,
"me ha robado las plumas
y a los nativos el oro".

Don Cartón, el pirata
no tuvo decoro,
exterminó a los nativos
y hasta mató al loro.

Devuelto a España encadenado
Cartón, el pirata deliraba,
"Soy dueño del tesoro,
de mares de esmeralda
y de montañas de oro".

Cristóbal el pirata,
cabeza hueca
y corazón de lata
murió sentado en una silla.

Una pierna la enterraron
en una isla americana
y la otra
la enterraron en Sevilla.

Dónde están hoy todos sus restos,
a ciencia cierta no es sabido,
Don Cristóbal, el pirata
aun después de muerto
anda perdido.

Poema nocturno para seres diurnos
Por la noche las sombras
se escapan de sus dueños
crean el caos en bares y cementerios,
escuelas y jardines
burdeles y monasterios
algunas se emborrachan
con el perfume de las flores
y se quedan dormidas
en los atrios de las iglesias
otras aprovechan
para vengarse de sus benefactores;
al otro día
sus dueños amanecen asombrados
y ensombrecidos
se ponen sus sombreros
abren sus sombrillas
y salen a las calles sombrías
sin siquiera sospechar
por qué sienten desconfianza
hasta de su propia sombra.

Mi patria

Mi patria tiene ríos y montañas,
lagos, llanuras,
selvas y playas.

Por mi patria vuelan aves
que decoran el cielo con sus alas,
guacamayas de azules plumas
y quetzales de colas largas.

En mi patria se hablan muchas lenguas
y se ven muchas caras.
Hablamos español, inglés, francés,
chino, quichua, árabe y japonés.

Mis compatriotas son blancos
negros y cobrizos,
de cabellos oscuros o rubios,
de pelo lacio y con rizos.

En mi patria crecen muchas frutas:
manzanas rojas como corazones,
piñas jugosas, naranjas, limones,
bananas doradas y sabrosos melones.

Por su geografía de desierto y piedra
se esconden culebras y salamandras
y por sus bosques con olor a selva
aúllan los monos y vuelan las garzas.

Mi patria tiene una gran bandera
donde se ven rayas y estrellas
soles y lunas,
triángulos y esferas;
mi bandera está vestida de colores
que representan el cielo, el mar,
los bosques y las flores.

Yo quiero a mi patria;
no arrojo basuras a las calles
pues la quiero ver bella;
no contamino ni su aire ni su agua,
y cada primavera
siembro un árbol en honor a ella.

Mi patria no tiene
ni cercas ni fronteras
las nubes la cruzan
las aves la vuelan
los ríos la bañan
y los mares la besan.

Mi patria tiene un sol
que siempre nos alumbra y nos calienta
y una luna que por la noche nos mira.
Mi patria es mía y es de todos;
mi patria respira,
da giros y vueltas.

Mi patria es una burbuja de vida
que flota en un universo
rodeado de estrellas;
mi patria es redonda
luminosa y bella.
Mi patria es el planeta Tierra.

Subasta pública
Cómprelos, llévelos, alquílelos,
los hay de todos los tamaños
y persuasiones
¿quién da más?
Pague dos y lleve tres,
políticos en promoción
calvos, barrigones, maquillados
usen pantalones o faldas
no importan las apariencias
porque por dentro todos son iguales
seres generosos
consigo mismos
de insaciables billeteras
y bolsillos sin fondo,
por su compra
le encimamos 2 generales
bien entrenados
en el arte de disparar
por la espalda;
pero en una subasta como ésta
no podría faltar
un ejemplar de presidente
el aquí presente
es flaco y de gafas
se come las palabras
y se chupa los dientes
especialista en subir los impuestos
y en bajar los sueldos
es obediente con el amo
y carnívoro con su pueblo
mastica el inglés
y sancocha el español
lo ofrecemos en alquiler
por horas, minutos o segundos
viene con bozal incluido
porque en un descuido
también puede morder.
¡A la una, a las dos, y las tres!
¡Esta tanda queda vendida
al amo del Norte!
Y no se les olvide
que tenemos más ejemplares
a la espera
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Mano firme, corazón grande
El policía
de mano firme y corazón grande
golpeó al preso con violencia
y después sintió lástima
de su heridas
El funcionario
de mano firme y corazón grande
cometió un gran desfalco
y después lloró por todos los niños
que se quedarían sin escuela
El general
de mano firme y corazón grande
dio la orden de disparar a mansalva
y después les dijo a las viudas
que lo sentía en el alma
El político
de mano firme y corazón grande
fue elegido presidente
pero al poco tiempo
ya no engañaba a nadie
ni con sus acciones ni palabras.

Diálogo...
—Madre, ayúdame a ser nube
y a dibujar montañas en el cielo.
—Eso no puedo, hija,
las nubes no tienen
alma ni cuerpo.

—Madre, ayúdame a ser viento
y a silbar con voz dulce por el firmamento.
—Eso tampoco puedo, hija,
el viento es escurridizo
y no hay lazos con qué cogerlo.

—Madre, ayúdame a ser el río
que le hace cosquillas a los cerros.
—Eso es imposible, hija,
el agua está hecha de humo
y se me escapa entre los dedos.

—Madre, ayúdame a ser árbol
y a echar raíces en el suelo.
—Eso sí puedo, hija.
Y la fruta cayó al suelo
y una semilla de amor
vio germinados sus deseos.