Header image  
             alianza de escritores y periodistas  
  INICIO  

                   NOTA EDITORIAL

          

                 TRES AÑOS DE TELESUR

                  

                   

Tres años celebró en días pasados la cadena internacional suramericana Telesur. Originada en Caracas, son socios de ella varios gobiernos de la región. En sus tres años de servicios Telesur ha originado una nueva forma de hacer televisión, y sobre todo, de hacer periodismo. Tal vez no sea exacto decir, en lo atinente al periodismo, que Telesur estableció una nueva forma. Pues, a diferencia de los demás medios informativos del continente, incluidas las grandes cadenas estadounidenses, y los diarios impresos de la gran prensa latinoamericana, Telesur está haciendo periodismo del mejor.

Telesur no se ha puesto al servicio de determinados intereses comerciales, ni se presta a informaciones sesgadas que favorecen a tal o cual corporación multinacional, o que propician como válidas únicamente las informaciones que muestren el flanco bondadoso de la política imperialista de los Estados Unidos –para lo que no es preciso mayor esfuerzo que el de reproducir los boletines de la embajada estadounidense o las declaraciones de sus funcionarios--, ni auspicia el juego mediático de la oligarquía latinoamericana que desdeña a su Continente como si no existiera.

Telesur defiende los intereses suramericanos, en primer lugar, y los latinoamericanos en general, así como los de los pueblos en desarrollo, no con adocenamiento, ni proclividad. Las informaciones de Telesur muestran siempre las dos caras de la moneda, no se limitan a suministrar algunos datos ligeros, sino que escudriñan un suceso en todos sus aspectos y los presentan al público para que, con todos los elementos a su alcance, juzgue y se forme su opinión. Nadie en estos tres años ha podido acusar a los noticieros de Telesur, ni a sus espacios de debate o de análisis, de estar parcializados.
Por primera vez en la historia de América Latina, desde su ya casi bicentenaria Independencia del colonialismo español, tenemos un medio de difusión que ha obrado el milagro de darnos a conocer que existimos. Hoy, gracias a Telesur, podemos saber a diario lo que ocurre en todos y cada uno de nuestros países, cuando hasta hace tres años adolecíamos de sistemas informativos que mencionaban a las naciones latinoamericanas con la misma rara frecuencia con que lo hacían respecto a las más remotas tribus africanas. Hoy los latinoamericanos sabemos qué es América Latina, conocemos a nuestros vecinos, tenemos conciencia de que nuestros pueblos están llamados a la unidad solidaria y de que la grandeza por la que propendió Simón Bolívar en medio de aterradora incomprensión es mucho más que una palabra sonora. Por la pantalla de Telesur hemos podido ver cuánta grandeza hay en estos pueblos que forman el continente suramericano.

Al felicitarnos por contar con un medio de información, divulgación y entretenimiento cultural como Telesur, y al festejar sus tres años, no ignoramos que su labor apenas comienza; pero es un comienzo que no tiene reversa.